Comer es un placer humano, hay personas que realmente viven y disfrutan cada bocado, pero cuando existe un impulso que no se detiene y se empieza a comer por llenar una emoción no superada o culpa; estamos frente alguien con un comer compulsivo.
Este comportamiento forma parte de los trastornos de la conducta alimentaria (TCA). A diferencia de la anorexia nerviosa o bulimia, el TCA se caracteriza por el consumo de alimentos sin control, sin conductas compensatorias inmediatas y con escasa conciencia del patrón alimenticio, lo que puede comprometer gravemente la salud física y emocional de quien la padece.
En este blog hablaremos sobre la diferencia entre el hambre fisiológica y el comer por compulsión, cómo detectar estas señales de alerta y qué acciones pueden ayudar a quienes padecen este trastorno de la conducta alimentaria.
Según autoridades del sector salud en México, ¿cuál es la diferencia entre comer por impulso y alimentarse para cubrir una necesidad biológica?
Comer por ansiedad es un factor importante que contribuye al sobrepeso de la población mexicana. La alimentación emocional se define como el acto de comer no por hambre física, sino como una estrategia para afrontar, evitar o regular alguna experiencia emocional. Es una respuesta a la apetencia, no a una necesidad biológica de alimento.1
Para lograr resultados positivos en el control de la nutrición emocional y en la gestión del peso, es crucial que las intervenciones estén guiadas por especialistas en salud mental.1
Psicólogos (as) y psiquiatras desempeñan un papel fundamental en este proceso, ofreciendo herramientas y estrategias para identificar y manejar las emociones internas que impulsan el acto de comer sin hambre.1
Andrea Calvo Rodríguez, jefa de departamento de la Dirección Normativa de Salud, subraya la importancia de evitar relacionar las emociones con la comida. Es decir, la comida no debe ser vista como una solución o un escape para el estrés, la tristeza, la ansiedad o cualquier otro sentimiento.1
Además, es esencial evitar formular juicios de valor negativos sobre la propia percepción corporal. Aceptar y respetar el cuerpo es un paso importante para desvincular la alimentación de la autocrítica emocional.1
Calvo Rodríguez propone un cuestionario de cinco preguntas para determinar si estás relacionando la comida con tus emociones; sin embargo esto no sustituye el diagnóstico de un profesional:1
- Emocional. ¿Los problemas son menos después de comer? ¿Me siento con hambre cuando tengo miedo?
- Familia. ¿Comer es un placer que se disfruta más en familia? ¿La hora de la comida es sagrada?
- Indiferencia. ¿Pongo poca atención en el contenido nutricional que consumo? ¿Ignoro la calidad de lo que como porque prefiero disfrutarlo?
- Cultura. ¿Es común que, estando en fiestas, coma más de lo normal? ¿Como más cuando asisto a reuniones?
- Efecto. ¿Comer mejora mi estado de ánimo? Cuando tengo hambre, ¿mi estado de ánimo cambia?
Se sugiere buscar el apoyo médico si cumplimos alguno de los puntos dentro de estos cinco aspectos.
¿Cuáles son algunas de las características de los pacientes que han llegado a comer compulsivamente?
Cada paciente tiene síntomas distintivos, por lo que es necesaria la evaluación de un experto en salud mental, un nutriólogo y el médico certificado de confianza para dar un diagnóstico acertado.2
A continuación compartimos algunos aspectos que pueden formar parte del perfil del comedor compulsivo.2
Episodios de consumo masivo y rápido. Una característica central es la ingesta de cantidades inusualmente grandes de alimentos en un corto periodo de tiempo, por ejemplo en solo dos horas. Durante estos episodios, la persona suele comer muy rápidamente, a menudo de forma descontrolada.2
Comer sin hambre y hasta la saciedad extrema. Quien come compulsivamente puede comer incluso cuando ya está lleno o no tiene hambre física. La ingesta continua hasta que se siente incómodo, incluso dolorosamente, lleno. Esta sensación de desbordamiento físico acompaña a la falta de control.2
Secreto y vergüenza. La vergüenza y la culpa son emociones muy presentes. Por ello, la persona tiende a comer sola o en secreto, intentando ocultar la magnitud de su ingesta para evitar el juicio o la humillación.2
Angustia emocional. Después de los episodios de atracón, es común que la persona se sienta angustiada, avergonzada o culpable por lo que ha comido. Este malestar emocional es un componente clave de la alimentación compulsiva.2
Ciclo de dietas y frustración: A menudo, quienes padecen de alimentación compulsiva recurren a dietas frecuentes en un intento de compensar o controlar la ingesta. Sin embargo, estas dietas suelen ser ineficaces para la pérdida de peso y pueden exacerbar el ciclo de atracón y culpa.2
Acumulación de alimentos y cambios emocionales. Un comportamiento observable puede ser guardar o almacenar grandes cantidades de comida, preparándose para futuros atracones. Además, son comunes los cambios de humor, como irritabilidad, ansiedad o tristeza, que pueden ser tanto una causa como una consecuencia de los episodios de alimentación compulsiva.2
¿Cuáles son algunas consecuencias importantes de comer compulsivamente?
Obesidad. Una de las consecuencias más directas y visibles es la obesidad. El consumo regular de grandes cantidades de comida, a menudo rica en calorías y poco nutritiva, conduce a un exceso de peso que puede ser difícil de manejar y que, a su vez, agrava otros problemas de salud.2
Diabetes tipo 2. El patrón de atracones y la ganancia de peso aumentan drásticamente el riesgo de desarrollar diabetes tipo 2. El cuerpo se vuelve menos eficiente en el manejo del azúcar en la sangre, lo que puede llevar a esta enfermedad crónica que requiere un manejo cuidadoso.2
Problemas cardiovasculares. Gracias al sobrepeso, el corazón debe esforzarse aún más. Esto trae como consecuencia un mayor riesgo de hipertensión arterial, enfermedades del corazón y accidentes cerebrovasculares, afectando la salud del sistema circulatorio y del corazón.2
Problemas con el sueño. Los atracones, especialmente si ocurren por la noche, pueden interrumpir el sueño de manera significativa. La digestión pesada y el malestar físico pueden dificultar conciliar el sueño o mantenerlo, llevando a problemas como el insomnio o el sueño no reparador.2
Síntomas gastrointestinales: El sistema digestivo también sufre las consecuencias. Es común experimentar síntomas gastrointestinales incómodos y recurrentes, como reflujo ácido (acidez estomacal), hinchazón abdominal y diarrea, debido a la sobrecarga y el procesamiento inadecuado de grandes volúmenes de alimentos.2

¿Cómo puede un paciente comedor compulsivo regular sus emociones hacia la comida?
Pausa y evalúa tu hambre. Antes de ir directamente a la nevera, tómate un momento. Cuestiona tu hambre. Dale cinco minutos para hacer una pausa y reflexionar antes de actuar impulsivamente. Pregúntate si es realmente hambre lo que sientes.3
Distingue hambre real de hambre emocional: Aprende a reconocer la diferencia. ¿Necesitas comer porque tu cuerpo te lo pide (hambre fisiológica) o porque estás sintiendo alguna emoción, como estrés, aburrimiento o tristeza? Identificar el origen de esa “hambre” es el primer paso para manejarla.3
Distráete o tómate un respiro: Si descubres que es hambre emocional, no te apresures a comer. En su lugar, intenta distraerte o tomarte un descanso de lo que estés haciendo. Puedes dar un paseo corto, escuchar música, leer un libro o hacer algo que te guste y te desvíe de la idea de comer.3
Busca consuelo sin comida: En lugar de buscar consuelo en la comida, intenta encontrar algo que te brinde bienestar o calma de otras formas. Esto podría ser hablar con un amigo, tomar un baño caliente, practicar meditación o dedicarte a un pasatiempo que disfrutes.3
En Grupo Punto de Partida buscamos desenterrar la razón de cada paciente que vive un TCA para poder ayudarle a sanar desde la raíz del problema. No estás solo (a) si tú o alguien que conoces está sufriendo por un TCA. ¡Escríbenos!
¿Qué puede hacer Grupo Punto de Partida por ti o un familiar si han sido diagnosticados con algún TCA?
Nosotros, Grupo Punto de Partida, clínicas especializadas en salud mental y en trastornos por abuso de sustancias, podemos ayudarte a ti y a tu familia, pues contamos con tratamientos psiquiátricos de última generación y con especialistas médicos del más alto nivel.
Además, brindamos un servicio personalizado bajo un enfoque integral sistémico, en el que se conjunta la ciencia médica, la innovación tecnológica y el respeto de los derechos humanos, tanto de nuestros pacientes, como de sus familias.
Si tú o alguno de tus familiares necesita ayuda, contáctanos por WhatsApp. Y si quieres conocer nuestras instalaciones, da clic aquí.
Referencias:
- SEGOB. Comer por ansiedad, factor que genera sobrepeso y obesidad: ISSSTE. [Internet]. Consultado en junio 2025. Disponible en: https://www.gob.mx/issste/prensa/comer-por-ansiedad-factor-que-genera-sobrepeso-y-obesidad-issste
- NIMH. Trastornos de la alimentación: Lo que debe saber. [Internet]. Consultado en junio 2025. Disponible en: https://www.nimh.nih.gov/sites/default/files/health/publications/espanol/los-trastornos-de-la-alimentacion/trastornos-de-la-alimentacion-lo-que-debe-saber.pdf
- Clevelan Clinic. Decoding Your Hunger: Are You Really Hungry or Not?[Internet]. Consultado en junio 2025. Disponible en: https://health.clevelandclinic.org/decoding-your-hunger-are-you-really-hungry-or-not